Ahorra en oro líquido
El aceite de oliva, como todo el mundo conoce, es uno de los alimentos más populares e importante de nuestra gastronomía, a la vez que contiene unas propiedades muy beneficiosas para nuestro organismo. Lo que poca gente conoce es que también se puede ahorrar si se sabe usar y reutilizar el aceite de oliva, sin que apenas se altere en su composición y sabor.
Y es que por sus cualidades físicas y químicas, el aceite de oliva es el aceite que mejor soporta las altas temperaturas sin que se descomponga ni de lugar a sustancias irritantes. Por ello es el aceite más aconsejado a la hora de freír los alimentos. Además, si la fritura se hace correctamente, el aceite de oliva es el que impregna menos grasa al alimento.
Por ello, para saber reutilizar esta joya de nuestra gastronomía y, a la vez, conseguir ahorrar, podemos seguir los siguientes consejos:
– No mezclar nunca un aceite nuevo con un aceite que ya esté usado, ni tampoco un aceite de oliva con uno de semillas ya que los aceites tienen diferentes puntos de humo, por lo que mientras que el de oliva aguanta más temperatura, el de semilla, que es menos resistente, se quema y contamina al de oliva con sustancias irritantes y potencialmente tóxicas, por lo que se reduce el número de veces que se puede reutilizar.
– Evitar el sobrecalentamiento del aceite de oliva, intentando no sobrepasar durante la fritura la temperatura de 170ºC; en caso de usar freidora eléctrica regula el termostato para que el aceite no humee ni se oscurezca. Si la temperatura es excesivamente elevada se generan sustancias que echará a perder el aceite.
La semana que viene continuaremos exponiendo más consejos que permitan reutilizar y ahorrar aceite.