Bacalao, todo el sabor de una estación
El bacalao es el protagonista de la temporada, fresco o en salazón, combina admirablemente con decenas de ingredientes, es rico en propiedades nutricionales y posee un sabor inigualable.
¿Cómo desalar el bacalao?
La mejor forma es cortarlo en trozos y ponerlos debajo del grifo para eliminar la sal fina de la superficie. A continuación, introducimos los pedazos de bacalao en un recipiente con agua fría, siempre con el doble de agua que el peso del bacalao. Dejamos en reposo durante 48 horas, cambiando el agua cada 8 horas, aproximadamente.
Es importante que el agua esté bien fría para evitar que el bacalao se abra. Un truco consiste en echar periódicamente cubitos de hielo para que el agua mantenga la menor temperatura posible. Si después de todos los cambios de agua necesarios se considera que el bacalao está un poco alto de sal, se puede poner a remojo durante 2 o 3 horas en leche fría e introducir unos ajos con su piel. Una vez desalado se escurre y se quitan las escamas –con cuidado de no levantar la piel entera- y las espinas.
Por otra parte, en nuestros supermercados puedes encontrar bacalao ya desalado y de alta calidad, a buenos precios. Resulta una opción cómoda ya que permite guardarlo un par de días en el frigorífico. También se puede congelar sin que su sabor y textura resulten afectados.
me gudta el mas tiene calidad y me gusta que nos deis recetas y cosejos soy cliente de la negrilla y el personal es magnifico