Cómo preparar el almíbar de miel perfecto
En la gastronomía andaluza abundan los dulces y postres con miel. Para que no queden tan empalagosos y que el resultado compacte bien, es habitual en nuestra cocina hacer un almíbar de miel, algo muy común, por ejemplo, en las torrijas o los pestiños. El proceso es muy sencillo, por si no sabes o quieres encontrar su punto ideal, te contamos en este post cómo preparar el almíbar de miel perfecto.
En primer lugar, como ingredientes para el almíbar necesita:
- Unos 500 ml de agua
- De 8 a 10 cucharadas de azúcar
- 4 cucharadas de miel
En segundo lugar, tienes que hervir todos los ingredientes juntos en un cazo a fuego medio y remover con una espátula de madera. Con que hierva entre 5 y 10 minutos es suficiente, pero puedes ir vigilando la textura que va alcanzando dependiendo del punto que quieras conseguir (liviano, más duro, punto de caramelo…). Si el almíbar se te pasa del punto que necesitas, puedes solucionarlo echando un poco más de agua y continuar cocinando.
Como ves es muy sencillo y te llevará pocos minutos prepararlo. Una vez que le hayas cogido el truco a hacer almíbar de miel puedes usarlo en muchas recetas: en salsas, con frutas, helados… o simplemente para mojar dulces y bizcochos. Además, el almíbar es un estupendo conservante de dulces y puedes elaborar con él unos riquísimos caramelos naturales.
Otros tipos de almíbar
Además del almíbar de miel, puedes preparar el clásico únicamente con azúcar y agua, con una proporción aproximada de una 1/2 taza de azúcar por cada taza de agua; o bien añadirle un toque de limón con azúcar, agua y la piel de un limón; o canela: con una ramita de canela. Incluso, puedes añadir un chorrito de licor como brandy, coñac o ron.
Para que el dulces se quede con el almíbar justo, recuerda escurrirlo un poco, por ejemplo en una rejilla, antes de dejar reposar. Y ¡disfruta de tu postre con almíbar!
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