Puerto de Indias: cómo preparar la ginebra de fresas perfecta
¿Has probado ya Puerto de Indias, la ginebra de fresa hecha en Carmona? Es la sensación del verano, y por eso hemos hablado directamente con sus creadores para que nos cuenten cómo se prepara la ginebra de fresa perfecta.
Lo primero es escoger una copa de balón alta o un vaso de boca ancha, porque así puedes oler a fresa mientras que te la tomas, y eso es un gustazo! Antes que nada, debes enfriar la copa con varios cubitos de hielo, y cuando ya la notes fría, los puedes tirar y escurrir la copa. Ahora ya puedes echar nuevos hielos, de tamaño medio, porque como la copa está fría aguantarán más tiempo sin derretirse y así no se aguará tu ginebra de fresas.
Llega el momento de incluir los elementos que van a decorar y que también potenciarán el sabor de tu copa. Las opciones que mejor le van a la ginebra de fresas son:
- Fresas naturales y limón. Es una combinación más ácida, dirigida a paladares acostumbrados a sabores más fuertes pero con un intenso sabor a fresa. Y es que lleva una ración doble de fresas: las que incorpora la ginebra en su elaboración y las que añades a tu copa, ¡un acierto seguro!
- Fresas naturales y naranja. En este caso, el toque cítrico lo aportará la naranja, que deberás cortar en pequeños trocitos antes de echarla a la copa.
- Naranja y ramita de canela. Esta mezcla fue una de las primeras que empezaron a servirse y es, sin duda, la más dulce de todas!
Si quieres potenciar la acidez de tu ginebra de fresas, puedes cortar la cáscara del limón y echarla en la copa, porque es ahí donde se concentra su sabor. Otra posibilidad es preparar rodajas de limón, y echarlas en tu Puerto de Indias, seguirá siendo ácida pero un poquito menos.
En cuanto a las especias, las bolitas de enebro siempre van bien con una ginebra. Eso sí: ¡acuérdate de partirlas o abrirlas para que potencie su sabor! También cardamomo y pimienta rosa pueden combinar muy bien con tu ginebra de fresas, o incluso frutos rojos o frutos del bosque deshidratados. La clave: elegir unos u otros, para que no se convierta en una batiburrillo de sabores.
A continuación, la pieza clave: tu ginebra de fresas. En cuanto a proporciones, cada uno elige la cantidad que desea, siempre intentando que sea equilibrada. Aquí cada maestrillo tiene su librillo: que si se echa 5cl, que si cuentes hasta 3 segundos mientras la echas… hay muchas formas de prepararla, para la ginebra de fresas tú eliges!
Ahora toca elegir acompañante: ¿cómo se hace un Gin Tonic con la ginebra de fresa? Puedes elegir cualquier variante de tónica (Nordic Mist o Nordic Blue, Fever Tree, Schweeppes normal o de pimienta rosa…), conseguirás un Gin Tonic de los de siempre! Si quieres un sabor más dulce, entonces un Sprite o un Seven Up te irán perfectos. Y para los que prefieren refrescos de limón, también son un buen acompañante para la ginebra de fresas.
Cuando ya lo hayas elegido, debes procurar echar la tónica lentamente para que no pierda ese componente de gas carbónico que tan bien le va al Gin Tonic. Los más expertos utilizan una cuchara imperial, donde golpea primero la tónica antes de caer a la copa.
Y voilà, ya tienes tu ginebra de fresas perfecta! ¿Conoces algún truco más para prepararla?