Cómo conservar el aceite de oliva correctamente

¿Sabías que el aceite de oliva es uno de los pocos alimentos que no caduca? Sin embargo, sí es aconsejable conservarlo correctamente para disfrutar de todas sus cualidades en cada momento de consumo. Ten en cuenta que se trata de un alimento totalmente natural sin más conservantes que los que obtiene durante su crecimiento.

Aunque no suponga ningún riesgo para la salud, si no se conserva adecuadamente, puede perder parte de su sabor, aroma o color. También pueden disminuir sus polifenoles, unas sustancias antioxidantes presentes en el aceite de oliva y, con ellos, sus propiedades beneficiosas para la salud.

Para que esto no te ocurra y puedas disfrutar de tu aceite de oliva siempre en su mejor estado, sigue estos sencillos consejos. ¡Cuida de nuestro oro líquido!

Conserva todas las propiedades de tu aceite de oliva

• Fecha de consumo preferente. Es cierto que el aceite no caduca, pero si tiene una fecha de consumo preferente que es recomendable respetar. Si ves que no vas a usarlo todo, cómpralo en envases más pequeños. ¡Tenemos aceite de oliva en todos los formatos que puedas imaginar! La fecha estimada de consumo depende del tipo de aceite de oliva: el que mejor se conserva es el aceite de oliva virgen extra, debido a su mayor cantidad de polifenoles y vitamina E.
• Envase hermético. Conserva tu aceite en envases herméticos que eviten su contacto prolongado con el aire, porque puede oxidarse y volverse rancio. Si vas a pasarlo de un recipiente a otro, asegúrate de que esté limpio, pues si quedan restos de aceite anteriores también podría enranciarse. El envase, mejor que sea de vidrio, latón o acero inoxidable, materias más aislantes.
• Temperatura fresca y constante. Mantén tu aceite de oliva en un lugar fresco y con poco humedad, a una temperatura constante de 16 a 18 grados, y siempre alejado de fuentes de calor. Si se expone a altas temperaturas de forma prolongada se puede modificar su textura. Si lo guardas a baja temperatura, observarás que puede llegar a solidificarse, aunque esto último no tiene ningún impacto en su correcta conservación. Tampoco es necesario meter el aceite de oliva en la nevera para conservarlo durante más tiempo, aunque si quieres hacerlo no pasa nada.
• Luz escasa. Evita que le dé la luz directa y guárdalo en un lugar oscuro o con poca luz, por ejemplo en el interior de la despensa o de un armario de la cocina. El exceso de luminosidad puede provocar su oxidación.
• Aislado de olores intensos. El aceite absorbe fácilmente los olores, lo que puede cambiar su sabor. Para que conserve todas sus cualidades, mantén tu aceite tapado y alejado de productos de olores intensos, así como de vapores o humos, incluidos los de la cocina.

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