Vitaminas: ¡fuente de salud!
El organismo humano tiene una capacidad limitada para sintetizar los componentes de ciertas vitaminas, de tal manera que para beneficiarse del aporte necesario de todas las que son imprescindibles para su correcto funcionamiento debe obtenerlas a través de la alimentación.
En una alimentación equilibrada no puede faltar el aporte diario de vitaminas necesario para el adecuado desarrollo de las funciones fisiológicas del organismo humano.
Clasificación de las vitaminas
En el organismo humano encontramos 13 tipos de vitaminas diferentes, que se clasifican en función de su solubilidad en dos amplios grupos:
- Liposolubles: A, D, E y K. Son las que se disuelven en grasas y aceites y se almacenan en el hígado y tejidos grasos.
- Hidrosolubles: En este grupo se incluyen todas las del grupo B y la vitamina C. Se disuelven en agua, y son las responsables de la mayoría de reacciones químicas del organismo.
Cómo podemos obtener vitaminas
El aporte de vitaminas al organismo se hace a través de la alimentación pero ¡cuidado!: si no tratamos correctamente los alimentos que contienen vitaminas podemos estar eliminando gran parte de su contenido vitamínico. Para evitarlo, proponemos algunas sencillas buenas prácticas que podemos incorporar a nuestras rutinas de cocina habituales:
- Evitaremos cocinar los alimentos en exceso: a temperaturas muy altas o durante mucho tiempo.
- La mayoría de las vitaminas de la fruta se encuentra en su piel por lo que, en la medida de lo posible, procuraremos tomarla con ella.
- Consumir, dentro de lo posible, las frutas y verduras frescas: es la mejor manera de evitar la pérdida vitamínica que conlleva la cocción.
- Daremos preferencia a la cocción con poca agua o al vapor, para minimizar esta pérdida de nutrientes. El caldo resultante de la cocción de estos alimentos podrá ser reutilizado para sopas o cremas.
Una alimentación equilibrada en la que se incluyan las 5 raciones de frutas y verduras recomendadas contiene todos los aportes vitamínicos necesarios para el desarrollo del organismo. Sin embargo, las personas que lleven dietas estrictamente vegetarianas deben velar por incluir suplementos de vitamina B12, ya que ésta se encuentra principalmente en alimentos vetados en este tipo de dietas tales como huevos, carne vacuna o de ave, marisco, leche y vísceras.
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