Damos la vuelta a la torrija con 7 recetas originales
Si tuviéramos que hacer una lista de los mejores dulces de nuestra tierra, sin duda alguna estarían las torrijas. Este delicioso bocado es una cita ineludible en tiempo de Cuaresma y Semana Santa. Pan, huevo, aceite, leche, miel, canela, azúcar y limón… en pocas recetas unos pocos ingredientes tan básicos tienen un resultado tan increíble. Pero, ¿qué te parece si este año te arriesgas con alguna de nuestras recetas originales de torrijas?
No te imaginas los riquísimos resultados que puedes obtener haciendo algún que otro cambio a la receta típica ¿Te atreves? Seguro que terminas de decidirte cuando veas las 7 recetas originales de torrijas que hemos recopilado en este post.
Pero si prefieres apostar por lo clásico y te decantas por las torrijas de toda la vida, este año te van a salir perfectas con nuestra ayuda. Pincha aquí y encontrarás nuestros trucos para hacer las mejores torrijas en 5 pasos.
- Torrijas en canutillo con chocolate. Esta variedad puedes hacerlas con Nutella o con chocolate para postres, derretido al baño maría. Tienes dos opciones: bañar las torrijas en chocolate en lugar de hacerlo con miel o rellenarlas por dentro con chocolate haciendo un canutillo. Para ello, aplana las rebanadas con un rodillo, unta de cacao y luego enrolla. Pasa por huevo, fríelas en aceite bien caliente y espolvorea con azúcar y canela ¡Están bien ricas!
- Torrijas con chocolate blanco y fresas ¿Suena bien, verdad? Para prepararlas, en lugar de mojar el pan en la leche especiada directamente, añade a la leche un par de yemas de huevo y unos trocitos de fresa y bate en el vaso de la batidora hasta conseguir una crema. Cuando esté fría, empapa bien tus torrijas; luego fríe, añade azúcar y, finalmente, derrite chocolate blanco y añádelo por encima a las torrijas. Acompaña con unas fresas en trocitos ¡De chuparse los dedos!
- Torrijas con dulce de leche ¿Eres de lo que no te puedes resistir al dulce de leche? Entonces, está será tu favorita de nuestras recetas originales de torrijas. En esta variante, se hacen parejas con el pan de torrija y se untan por dentro (como si fuera un sándwich) con dulce de leche. Luego, se mojan en leche hervida con anís en grano, azúcar avainillado, un par de estrellas de anís y una ramita de canela, una vez que esta se haya enfriado. A continuación, lo pasamos por huevo batido, freímos en abundante aceite y terminamos rebozando con azúcar y canela. ¡Ya está!
- Torrijas de coco. Entre las recetas originales de torrijas más curiosas está esta de coco. La diferencia con las clásicas está en que el pan se sumerge en leche de vaca mezclada con leche de coco antes de rebozarlas en huevo y freírlas. Luego, cuando vayas a espolvorear el azúcar y la canela por encima, añade un poco de coco rallado ¿Cómo están?
- Torrijas con frambuesa. Añade un nuevo sabor a tu torrija de siempre acompañándola de una salsa de frambuesa. Los primeros pasos de esta receta son los de una torrija clásica: empapa bien el pan en leche emulsionada con canela, esencia de vainilla y azúcar. Escurre y pasa por huevo batido. Fríe y pasa por azúcar y canela. Cuando estén listas, riega con una salsa elaborada con frambuesas cocidas con azúcar a la que se le añade 1 lámina de gelatina. Cuela para eliminar las pepitas y cuando esté fría, ¡Vierte encima de tus torrijas!
- Torrijas caramelizadas con helado. Sin duda, una receta diferente en la que se elimina el rebozado con huevo y la fritura. Lo único que tiene que hacer es mojar tu pan en leche hervida con azúcar y ramas de canela, ya fría, y dejar escurrir y enfriar en la nevera al menos 1 hora. Cuando vayas a servir, espolvorea azúcar sobre las torrijas, quemándola con un soplete y acompaña de un bola de tu helado favorito.
- Torrijas con amaretto. Esta es una versión para mayores con un sabor muy original. Cuando vayas a hervir la leche, además del azúcar, la canela, vainilla y las cáscara de limón, añade 3 cucharadas de amaretto o licor de almendras. Cuando temple, vertemos sobre las torrijas abundantemente. Los siguientes pasos son los tradicionales: pasa por huevo y fríe con aceite muy caliente ¡Qué ricas!
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